miércoles, 19 de septiembre de 2012

Barranco Trevijano

Después del parón debido a las altas temperaturas del verano, vacaciones y a la preferencia por las tardes de piscina y cervecita, reanudamos la costumbre iniciada allá por el mes de Mayo de los Martes Endureros.

Hoy era un día especial porque iba a ser el bautismo de fuego de mi nueva bici, una YT Wicked 160 Ltd, ideal para estas rutas cortas en km. pero intensas en esfuerzo y exigencia técnica.




Así que tras insistir un poco, casi nada, convenzo a Víctor y Alberto para que me acompañen. La ruta elegida, bajar el Barranco Trevijano desde Trevijano hasta Soto.

Tras un tramo de carretera para calentar, iniciamos la subida lentamente por la pista que sube desde Leza hasta los Corrales de Zorralamuela. La subida es durilla, sobre todo al principio, y las ruedas de 2,4 pulgadas lastran mucho aunque proporcionan un buen agarre en zonas de poca adherencia. La geometría de la bici y las suspensiones hacen que el esfuerzo sea mucho mayor, pero mis amigos deciden darme un respiro y aflojan el ritmo para no dejarme muy atrás.


Antes de acometer el tremendo rampón que es el último km. nos tiramos a la izquierda por la senda que va llaneando hasta enlazar con la senda que baja a Trevijano.



La senda está muy bien y se rueda fácilmente, salvo algún tramo cerrado por la vegetación que nos deja su marca en piernas y brazos.



Algún enlace entre terraza y terraza pone a prueba nuestras fuerzas,  



y el agarre de unas buenas ruedas queda patente.



Al llegar a un collado, iniciamos el descenso hacia Trevijano, por una senda que tiene sus partes rápidas y sus tramos de piedras grandes que nuevamente ponen a prueba a nuestras bicis y en la que mi nueva YT demuestra su marcado carácter endurero permitiéndome bajar muy seguro y rápido.


En Trevijano, paramos lo justo para coger agua y comenzamos a bajar el Barranco.



Debido a la época del año el barranco, que casi siempre baja seco, está totalmente agostado.




Esta senda es más técnica que la anterior, con más piedras



 y escalones,


pero nuevamente la bici responde: suspensiones, ruedas, geometría y sillín con tija telescópica son unos aliados perfectos para bajar por este tipo de sendas.


Al llegar a Soto,



volvemos tranquilamente por el camino que va hacia el mirador, lo que nos permite disfrutar de las vistas sobre el cañón del río Leza, mientras imaginamos nuevas rutas aún por descubrir.



En resumen, la ruta, no por conocida es menos interesante de repetir; la bici….pues con ganas de volver a cogerla pronto y disfrutar de las tremendas posibilidades que tiene; y la compañía, pues que la cervecita que nos hemos tomado ya en Logroño ha sido el colofón perfecto para esta tarde de martes, para esta tarde de enduro, para esta tarde de amigos.

El resto de las fotos en

https://plus.google.com/photos/113656869193957184650/albums/5789635389944750913

3 comentarios:

  1. Ya había perdido las sensaciones de estos días entre semana dandole al enduro. Me lo pasé de cine.

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  2. Fue un placer reencontrarnos de nuevo en estas tardes de martes. Que duren!

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  3. Hay que ir pensando ya en la siguiente... vosotros dirés! Esa YT pide más guerra!

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